Por Jordi - 20/10/2025 14:31

Hoy, llevo a los hijos de mi jefa a su casa para ayudarla. En el camino no entendí al principio por qué tenían lágrimas en los ojos. Había olvidado mi llavero de plástico colgando del retrovisor: un dedo falso, cortado y ensangrentado. FML
De acuerdo, es una vida HP 40
Te lo mereces 17

Lo mismo, diferente sabor